La CUBRA desempeña un papel clave en la defensa y promoción de la profesión bioquímica en el país. En un escenario nacional marcado por una profunda crisis económica, tanto los profesionales como los laboratorios enfrentan múltiples desafíos, desde el aumento de costos hasta la desactualización de aranceles.
La crisis económica actual afecta tanto a nivel nacional como regional. Los laboratorios bioquímicos están enfrentando un fuerte incremento en los costos laborales y de insumos, lo que repercute directamente en la rentabilidad de las instituciones. La actualización de los aranceles no ha sido suficiente para acompañar estos aumentos, generando una constante desventaja para los profesionales que intentan recomponer sus honorarios. Aunque algunas regiones del país cuentan con una mayor capacidad de negociación que otras, las dificultades mencionadas se extienden a lo largo de todo el territorio.
La situación es crítica para los bioquímicos, quienes enfrentan una constante pérdida de poder adquisitivo debido a que los costos aumentan más rápido que los ingresos. La crisis económica ha afectado tanto la capacidad de los laboratorios de mantenerse rentables como la posibilidad de negociar mejores condiciones para los profesionales. Si bien las diferencias regionales en cuanto a la valorización del trabajo son evidentes, la realidad común es la de enfrentar crecientes dificultades financieras.
CUBRA se ha posicionado como un actor relevante en los espacios donde se debaten cuestiones relacionadas con la profesión bioquímica y la salud pública. Si bien la Confederación no administra contratos de prestación de servicios, actúa como un nexo entre los financiadores y las instituciones provinciales encargadas de gestionar estos convenios. La defensa de los intereses de los bioquímicos y la promoción de políticas públicas que favorezcan el desarrollo de la profesión son pilares fundamentales de la organización.
La formación continua de los profesionales bioquímicos es una prioridad para la CUBRA. La Confederación trabaja sobre la reglamentación de la organización de congeso. Junto con las provincias anfitrionas, congresos nacionales de bioquímica cada dos años, y apoya también la realización de congresos regionales en los años en que no se llevan a cabo los nacionales. A su vez, dentro de su estructura institucional, la CUBRA cuenta con diversas comisiones de trabajo dedicadas a temas como Nomenclador Bioquímico Único (NBU), calidad, ciencia, y la organización de eventos científicos.
La participación de los jóvenes es fundamental para el futuro de la bioquímica en Argentina. La Comisión de Jóvenes Profesionales de la CUBRA, conformada por colegas de diversas regiones del país, se ha creado como un espacio de intercambio de ideas y propuestas. Este ámbito busca fortalecer el sentido de pertenencia de los nuevos profesionales y acercarlos a las instituciones, con el objetivo de promover la participación activa de las nuevas generaciones en la defensa de la profesión.
A través de su trabajo y sus comisiones, la CUBRA busca fortalecer el rol de los bioquímicos y garantizar un futuro donde la profesión siga evolucionando y respondiendo a las necesidades de la salud en el país.